Derrota nuevamente frente a Oberena

Derrota de nueva en la capital del reino, esta vez frente al otro equipo de la ciudad, Oberena, y por idéntico resultado al de la semana pasada 3-1. También esta semana es un resultado engañoso y la única partida que claramente se inclinó a favor de los pamploneses fue la del primer tablero, veamos como fue la ronda partida a partida:
Navarro – Aguirre 1-0

Iosu jugó la variante que le gusta de la defensa francesa y para la jugada 12 ya estaba perdido. Aunque para el espectador pareciera que se les había olvidado mover las piezas, los dos tuvieron varias “clavadas”, y para la jugada 14 prácticamente estaban ya en apuros de tiempo (sobre todo Iosu), la posición era ya crítica para el jugador andoaindarra y una serie de sacrificios del jugador navarro decidió la partida.

Corral – Montoya 0-1

Nuevamente Javi tuvo una partida claramente ventajosa y nuevamente dejó escapar su ventaja para dejarse un ataque de mate en los apuros de tiempo. La única lectura positiva que se puede hacer es que se está adaptando bien a su nuevo repertorio, por otra parte esto le cuesta toneladas de tiempo en cada partida que luego se hace notar, pero no creo que esto sea excusa para su baja forma y las razones habrá que encontrarlas en otro lado.

Aguinaga (creo) – Manso 1-0

Partida extraña de Félix, en la apertura se queda atrás y el blanco monta un pseudo-ataque que no parece llevar a ningún lado, pero su ventaja de espacio y el alfil de casillas blancas del negro que está entorpecido por sus peones le asegura un ligera ventaja. Al final se abre el juego y se llega a un final de torres totalmente entablado, el blanco porfía durante 30 jugadas, yendo de un lado a otro con su rey y con su torre sin mucho sentido y sólo esperando un fallo del jugador urnietarra, al final, en un lapso de concentración, este fallo se produce y Félix se tiene que rendir. Otro medio punto que se escapa y se hará sentir.

Mendikute – Cobos 1-0

Sin haberla analizado mucho buena partida de Claudio, se jugó una siciliana en la que Claudio juega su variante preferida, aquella en la que se come un peón en c5, y que ya en la jugada 8 se encuentra en terra incognita. En el post-mortem queda claro que el negro conocía la posición pero la respuesta del blanco era novedad teórica también para él y se empezó a jugar. La posición es un lío enorme y el negro hace varias jugadas “dudosas”, entonces para aprovechar su ventaja Claudio sacrifica una calidad, y a cambio obtiene otro peón más y la pareja de alfiles, a continuación el jugador pamplonés abre el juego y los alfiles no tardan en dar la puntilla.