Urnieta 3,5-Oberena 0,5

Encuentro en casa pero con los colores de fuera, extraño pero todavía nos quedan otras dos rondas así. La tarde era fría pero enseguida se calentó en los tableros...

Jose Luis Olazagoitia – Iosu tablas

Reñida partida en el primer tablero en el la que el blanco sentía que estaba jugando contra si mismo, la apertura fue una francesa del cambio con Cc3, y por una vez el entrenamiento sirve para algo y Iosu conocía un buen plan gracias a una paliza que le pegó Félix en navidades. Así pues Iosu iguala fácil y empieza a presionar, el blanco comete alguna imprecisión y adquiere ventaja, pero ya está en un final de torres y jugando con el +30. No acierta y una vez más hace cierto eso de que todos los finales de torre son tablas.

Félix – César Arrese 1-0

Partida loca de verdad, el negro juega un gambito Fajarowicz y Félix no se acuerda de lo que dice la teoría y se mete en un lío desde el principio, con su rey en el centro y sin poder desarrollarse correctamente. Así pues decide sacrificar un par de peones para liberarse, pero aún y todo el negro sigue con ventaja decisiva, pero sin concretar. En el final, y apuro de tiempo por supuesto, el negro ve una ilusión y sacrifica un caballo pensando que coronaba, pero no es así y la ventaja pasa al lado de Félix que no perdona.

Jose Mª González – Claudio 0-1

Un gambito de dama en el que el blanco juega pasivo y deja a su alfil de casillas negras dentro de la cadena de peones. Claudio iguala fácilmente y pasa al ataque en el flanco de dama, gracias a un par de imprecisiones blancas consigue ventaja y entonces el blanco sacrifica un peón esperando que el negro caiga en un truco y se enrede la posición. Claudio cae pero sigue teniendo ventaja decisiva, que con alguna imprecisión consigue convertir en victoria.

Eneko – Txus Aginaga 1-0

La partida más rara de la ronda, Eneko juega con alegría la apertura y se enroca largo, solo para caer bajo un tremendo ataque negro. Tremendo para un humano porque la computadora nunca le da demasiada ventaja al negro. El jugador de Oberena no encuentra el camino para atacar y en un final de torres comete un error dejándose un peón y con ello la partida.

Buen resultado, pero engañoso para los méritos en el tablero. La semana que viene frente a Zornotza, un equipo que está ahí arriba y con los que lucharemos por la permanencia.